Una de las citas del verano que intento no perderme:
Las Perseidas, lluvia de estrellas fugaces.
Es una maravilla ver esos fuegos naturales cruzar el cielo.
Anoche descubrí, que aparte de grillos, pajarillos, vientos y ríos,
se escuchaban nuestras exclamaciones.
Parecía un festival de onomatopeyas.
Casi podrías describir la estrella fugada por el ruído inspirado.
Y la vía láctea no dejándose fotografiar.
Esta noche de nuevo! Con saco y a lo loco.
Feliz verano*